Muchas veces, por falta de conocimiento o mala información, pensamos que la oposición es algo fácil y que como “los funcionarios no hacen nada” el haber llegado ahí será muy fácil. Había un dicho que decía: “O estudias o eres policía”. Esto puede que fuera verdad 20 años atrás, pero hoy por hoy, estudiar una oposición requiere de mucho esfuerzo y sacrificio. Mucha gente empieza a opositar pensando que en unos pocos meses estarían dentro de la Administración y tendrían su vida resuelta. La realidad es otra y cuando esta les golpea de frente, no saben cómo afrontarlo y deciden abandonar. No dejes que sea tu caso. La oposición es un camino duro y muchas veces solitario, compites contra ti y contra otros. Mentalízate, estate preparado y podrás conseguir tu meta.
El preciado tiempo. Dicen que el tiempo es oro y en este caso más que nunca, es verdad. Por desgracia no todos podemos dedicarnos plenamente a estudiar la oposición, tenemos responsabilidades familiares, compromisos sociales y demás factores que nos quitan tiempo del estudio. Si somos lo suficientemente afortunados como para poder permitirnos “trabajar a tiempo completo” en nuestra oposición muchas veces no sabemos cómo distribuirlo y acabamos gastando recursos de forma no apropiada. Para evitarlo debemos la planificación adecuada es esencial debemos fijarnos unas metas intermedias y objetivos que poco a poco nos ayuden a conseguir nuestro objetivo.
La falta de disciplina o dedicación es uno de los principales factores que nos hacen abandonar una oposición. Debemos entender la oposición como otro trabajo más, es un contrato en prácticas que llevará a nuestro trabajo soñado. Para ello es muy importante mentalizarnos de que estaremos un tiempo fastidiados, que nos perderemos eventos y muy posiblemente tiempo de estar con los nuestros. Lo mejor es no perder de vista nuestro objetivo y agarrarnos a él con garras y dientes y no dejarlo escapar hasta conseguirlo. Es una carrera en la cual cada minuto que tú le dediques a ello, será ventaja sobre los demás.
Aunque nuestros amigos siempre están ahí para apoyarnos debemos tener en cuenta aquellos que sin querer nos ralentizan un poco. No todo el mundo entiende lo que es opositar. Algunos piensan que estudiar no es duro y que si no se hace esta noche se hará mañana o pasado o al otro. Por ello intentan, egoístamente, pero sin mala intención pasar tiempo contigo, pues tú, en teoría, estas siempre disponible, total “solo tienes que estudiar”. Nuestros amigos tienen que ser un pilar básico en nuestra vida pero debemos hacerles entender que nuestra decisión es firme y que igual que ellos tienen sus responsabilidades, tales como trabajo, familia, etc. nosotros también y no podemos eludirla siempre que nos apetezca.
El temario es otra de las grandes causas de abandono de la oposición. Si no elegimos bien el temario, estos pueden ser muy extensos, irrelevantes, desactualizado o poco adaptado al opositor y las circunstancias. Principalmente pasas cuando decides estudiar de primeras una oposición, el desconocimiento en general de la oposición te lleva a hacer malas elecciones, que con el tiempo iras subsanando. Una forma de evitarlo es acudir a foros especializados y recabar información de otros opositores con más experiencia. Por supuesto lo ideal sería tener el temario de una academia, pues estos se van actualizando y están optimizados. Los profesores saben que es lo más relevante y donde hay que centrar el estudio.